Aún estoy aquí... y ésta vez con un recuerdo.
Ha pasado poco más de un año desde que escribí...
La Ita se fue al cielo...
Ita es como le decían a la señora Raquel Labraña, abuela de Leonardo, el padre de mi hijo.
Una mujer especial, con aires de gran dama y un muy agudo sentido del humor.
Se fue de ésta vida. Murió el martes 23 de octubre. No se por qué lo relacioné con mi mamita.
Ella también murió un martes 23 pero de marzo de hace ya 6 años.
Me dolió la partida de la Ita. Tal vez porque la sentía un poco como la abuela que yo nunca tuve. Quedó el Tata solito. La va a echar tanto de menos. Estuvieron 64 años casados. Toda una vida... ¡que lindo!
Parece que los hombres y las mujeres de antes se amaban más... o se tomaban más en serio el matrimonio.
En fin... la partida de la Ita me hace pensar en los lazos que uno crea con las personas que va conociendo a lo largo de la vida. Ella no era nada mío, me refiero a que no había un parentesco y sin embargo significaba algo especial. Nunca me olvido cuando le llevamos al Matías recién nacido y su saludo fue "¡Hola gran Matías!. Eres el hijo de mi nieto. No te tocó el mejor padre, pero tampoco es tan malo".
Fue una gran mujer, con defectos y virtudes como todos los seres humanos, pero dejó lindos recuerdos en su familia y en las personas que la conocieron. Buen viaje querida Ita.
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